Introducción
El hombro congelado, también conocido como capsulitis adhesiva, es un proceso que se caracteriza por la pérdida progresiva de movilidad tanto activa como pasiva en la articulación glenohumeral, acompañada de dolor. Este trastorno puede presentarse de manera primaria, cuando su causa es desconocida, o secundaria, cuando está relacionado con otro proceso, siendo en muchos casos resultado de intervenciones médicas.
Etiología y Prevalencia
Comorbilidades que están vinculadas con esta afección incluyen la diabetes, alteraciones tiroideas (principalmente hipotiroidismo), nefrolitiasis, Parkinson, cáncer, lesiones en el hombro, tabaquismo y cirugías cervicales.
Según la literatura actual, la incidencia global de esta condición se encuentra en el rango del 2-5%. Predomina en individuos con edades comprendidas entre los 40 y 60 años, siendo más frecuente en mujeres (70%).
Es importante destacar que aquellos con condiciones médicas previas, como diabetes tipo I en personas mayores de 45 años, enfrentan un riesgo aumentado, incrementándose entre un 10% y un 38%.
Aproximadamente un 20%-30% de los pacientes que experimentan capsulitis en un hombro pueden llegar a desarrollarla en el lado opuesto, mientras que es poco común que se repita en el mismo miembro.
Evolución y Tratamiento Fisioterapéutico
En el abordaje de esta condición, el enfoque conservador es la opción primaria y su efectividad depende de la fase de desarrollo en que se encuentre la afección:
- Fase Inicial – Congelación: Esta etapa, que puede durar alrededor de 13-36 semanas, se caracteriza por la pérdida gradual de movilidad y un dolor intenso. El objetivo principal en esta fase es reducir el dolor y preservar el rango de movimiento actual, logrado mediante ejercicios pendulares y otros enfoques.
- Segunda Fase – Hombro Congelado: Con una duración de 4-12 meses, esta etapa se caracteriza por una menor movilidad y dolor de intensidad moderada. En el tratamiento, se emplean técnicas de movilización como Mulligan, Maitland, Kaltenborn y las técnicas Spencer.
- Fase Final – Descongelación: Esta última fase, que puede extenderse entre 12-42 meses, se distingue por una ganancia gradual de movilidad y una disminución del dolor. El objetivo del tratamiento es optimizar la ganancia de movilidad y reducir el dolor de manera eficiente y efectiva en el menor tiempo posible. Para ello, se combinan diversas técnicas de movilización, estiramientos y el uso de termoterapia. También se ha evidenciado la efectividad de la terapia en espejo para mejorar la movilidad y el dolor.
En situaciones en las que el tratamiento conservador no produce resultados satisfactorios, es posible considerar opciones más invasivas como la hidrodilatación o procedimientos quirúrgicos realizados bajo anestesia.
El Papel Vital de la Fisioterapia en la Capsulitis Adhesiva
La fisioterapia desempeña un papel crucial en el tratamiento y la recuperación de los pacientes que sufren de capsulitis adhesiva, también conocida como hombro congelado. Al utilizar enfoques especializados y técnicas respaldadas por la evidencia científica, los fisioterapeutas pueden ayudar a aliviar el dolor, mejorar la movilidad y optimizar la calidad de vida de los pacientes.
Aquí te presentamos cómo la fisioterapia puede marcar la diferencia en el manejo de esta afección:
1. Evaluación Integral: Los fisioterapeutas realizan una evaluación completa para comprender la gravedad y el alcance de la capsulitis adhesiva en cada paciente. Esto incluye analizar la historia clínica, la movilidad articular, la fuerza muscular y la identificación de posibles factores contribuyentes.
2. Diseño de Plan de Tratamiento Personalizado: Basándose en la evaluación inicial, el fisioterapeuta crea un plan de tratamiento adaptado a las necesidades individuales del paciente. Este plan puede evolucionar a medida que progresa la recuperación.
3. Manejo del Dolor: Los fisioterapeutas utilizan técnicas específicas para reducir el dolor en las diferentes fases de la capsulitis adhesiva. Esto puede incluir terapias manuales, técnicas de movilización, ejercicios de estiramiento y aplicación de calor o frío.
4. Mejora de la Movilidad: La movilidad limitada es uno de los principales síntomas de la capsulitis adhesiva. Los fisioterapeutas trabajan en estirar y movilizar la cápsula articular y los tejidos circundantes para restaurar gradualmente el rango de movimiento.
5. Ejercicios Terapéuticos: Se prescriben ejercicios específicos que se adaptan a cada fase de la condición. Estos ejercicios ayudan a mantener la movilidad, mejorar la fuerza y prevenir la atrofia muscular.
6. Técnicas de Movilización: En la fase de «hombro congelado», se utilizan técnicas de movilización específicas para mejorar la movilidad articular y reducir la rigidez. Los fisioterapeutas emplean enfoques como las técnicas de Mulligan, Maitland y Kaltenborn.
7. Educación del Paciente: Los fisioterapeutas brindan a los pacientes información sobre su condición, lo que les ayuda a comprender el proceso de recuperación y a adoptar medidas de autocuidado.
8. Terapia en Espejo: En la fase de «descongelación», la terapia en espejo puede ser beneficiosa para reentrenar el cerebro y mejorar la coordinación entre ambos hombros. Utiliza un espejo para simular movimientos con ambos brazos, lo que puede ayudar a reentrenar el cerebro para mejorar la coordinación y la movilidad.
9. Prevención de Recurrencias: Los fisioterapeutas enseñan a los pacientes ejercicios y consejos para prevenir la recurrencia de la capsulitis adhesiva en el futuro.
10. Monitoreo y Ajuste del Tratamiento: El progreso del paciente es monitoreado de cerca y el plan de tratamiento se ajusta según sea necesario para asegurar resultados óptimos.
Estilo de Vida y Autocuidado:
- Dieta Saludable: Mantén una alimentación equilibrada y rica en nutrientes. Consumir alimentos que promuevan la salud ósea y la función articular, como alimentos ricos en calcio y vitamina D, puede ser beneficioso.
- Actividad Física Moderada: Aunque el ejercicio intenso puede exacerbar la condición, la actividad física moderada como caminar o nadar puede contribuir a mantener la salud general y prevenir la rigidez.
- Control del Estrés: El estrés puede afectar negativamente la recuperación. Practica técnicas de relajación como la meditación, la respiración profunda y el yoga para reducir el estrés y mejorar la sensación de bienestar.
- Descanso Adecuado: Duerme lo suficiente para permitir que tu cuerpo se recupere y sane. Adopta una postura cómoda para dormir que no ejerza presión adicional en el hombro afectado.
- Postura y Ergonomía: Mantén una postura adecuada al sentarte y trabajar para evitar la tensión en el hombro. Ajusta la altura de tu silla y la posición de tu escritorio para mantener una ergonomía óptima.
- Hidratación: Mantén una buena hidratación para asegurarte de que tus tejidos se mantengan flexibles y saludables.
- Cumplimiento del Tratamiento: Sigue las indicaciones de tu equipo médico y fisioterapeuta de manera constante. Cumple con las sesiones de terapia y realiza los ejercicios recomendados en casa.
Recuerda que cada persona es única, por lo que es crucial adaptar estas recomendaciones a tus necesidades individuales y seguir las indicaciones de los profesionales.
Con un enfoque integral, que incluya tratamiento de fisioterapia, ejercicios específicos y un estilo de vida saludable, estarás en el camino correcto hacia la recuperación y la restauración de la movilidad en tu hombro.
Conclusiones
La capsulitis adhesiva, conocida como hombro congelado, es una condición que afecta la movilidad y causa dolor en la articulación glenohumeral.
Afectando a un rango diverso de personas y relacionada con diversas comorbilidades, su tratamiento se basa en fases específicas que buscan reducir el dolor y restaurar la movilidad.
La fisioterapia es una herramienta esencial en la gestión de la capsulitis adhesiva. Los fisioterapeutas no sólo proporcionan alivio del dolor y mejoran la movilidad, sino que también empoderan a los pacientes con las habilidades y el conocimiento necesarios para participar activamente en su recuperación.
La combinación de enfoques conservadores y, en casos selectos, intervenciones más invasivas, permite abordar esta afección y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
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CARMASALUD | Centro Clínico e Investigador
Autor del artículo: Esther Gil, Fisioterapeuta
